Es tradición desde hace casi un siglo que en fechas de febrero, coincidiendo con la celebración de las santas Agueda y Apolonia, sean las mujeres quienes paguen la fiesta y sea una celebración solo para ellas
En este municipio del Bajo Cinca, antiguamente las casadas celebraban Santa Águeda y las solteras Santa Apolonia. Las celebraciones están compuestas de muchas particularidades, algunas vienen de lejos y otras forman parte de la moderna evolución de la fiesta. Por ejemplo, tal y como se puede leer en el blog de la Rondalla Virgen de Loreto, se sabe que la hoguera es tan antigua como la misma fiesta y la cena del viernes es algo bastante moderno.
Actualmente, la fiesta está unificada y la pagan las mujeres con una cuota de 35 € por persona (este año, a partir de las nacidas en 2010). Además, para financiar las celebraciones, también venden lotería y tiras para un sorteo en el que solo pueden participar las mujeres vestidas con el traje típico. El viernes por la noche es exclusivo para las mujeres, pero los actos del resto del fin de semana están abiertos también a los hombres. Hoguera, cena, orquesta, disco-móvil y, por supuesto, el tradicional Pan Bendito, no pueden faltar en esta fecha que tiene a las mujeres de Ballobar como las protagonistas de la fiesta.
Hoy en día, las mujeres están orgullosas de mantener esta tradición y se esfuerzan por conservar la herencia histórica de madres y abuelas.
En la época actual, marcada por la lucha por la igualdad y las reivindicaciones, es curioso descubrir tradiciones cercanas de empoderamiento femenino y matriarcado en el Bajo/Baix Cinca. Al igual que esta tradición de Ballobar, conocemos la figura de ‘La Fragatina’, la celebración del ‘Día de La Faldeta’ o la primera huelga feminista protagonizada por les ‘encaixonadores de figues’, hace casi 100 años.
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