Los verdes se lo pusieron difícil al campeón de la categoría que se llevó la victoria al transformar un dudoso penalti en el último suspiro del partido
El Mequinenza plantó cara al líder de la categoría en un partido competido que, finalmente cayó del lado del Andorra en el último suspiro por un penalti, protestado por los locales, que trasformó Miranda y que acabó dando la victoria y el campeonato matemáticamente a los visitantes en el derbi minero. Los verdes consiguieron contener al rival en un buen partido que tuvo un amargo final para el Mequinenza, que siguen buscando el milagro de la salvación a falta de tres partidos para acabar la liga.
Los blancos, que jugaron con la segunda equipación en “Las Rías”, se hicieron rápidamente con el dominio del balón ante un Mequinenza muy serio en defensa per sin control de balón. Esa fue la tónica de los primeros 45 minutos, que dejó hasta tres buenas ocasiones para los visitantes. La primera, la más clara, se producía en el minuto ’15 en una jugada de Pescador que Giménez, solo, no acierta a rematar. La segunda se produjo en el ’32, cuando Djiby, atento, desbarata en última instancia un rebote que da en Giménez tras una jugada de Miranda. La tercera ocasión fue un disparo lejano de Villanueva a tres minutos del descanso. Previamente, en el ’40, los verdes dispusieron de una ocasión al recuperar un balón tras presión que Jon, desde el vértice del área, manda alto por poco.
La segunda mitad comenzó con susto tras un choque fortuito de Montañés con la valla que rodea el campo y que acabó con el jugador del Andorra sustituido por precaución tras sufrir un golpe en la cabeza en la caída. Tras cinco minutos de parón para atender al jugador, que abandonó el terreno de juego por su propio pie, el juego se reanudó con un Mequinenza que se estiró y comenzó a generar peligro. A la hora de juego se produjo la mejor ocasión para los locales en una contra que lanzó Pol y que Yaya mandó alto por poco.
Los visitantes trataban de responder pero sin fortuna hasta que al filo de cumplirse el tiempo reglamentario Cubero estrella un balón en el palo de la meta que defendía Djiby tras una jugada por la izquierda conducida por Montañés. Pero cuando parecía que todo estaba decidido, en el descuento, el árbitro señaló un penalti, que desde Mequinenza indican como inexistente, en una jugada de ataque del Andorra que transformó en gol Miranda. Jarro de agua fría para los locales que cada vez tienen más cerca el descenso de categoría.